CRYPE – Pionero de la libertad digital
En un mundo donde la comunicación digital adquiere cada vez más importancia, CRYPE apuesta de manera constante por la tecnología punto a punto (P2P), como base de la verdadera libertad y seguridad.
P2P significa: sin desvíos a través de servidores centrales, sin dependencia de terceros y sin riesgo de uso indebido de datos.
La filosofía de CRYPE es también una promesa: la privacidad es un espacio protegido donde las personas pueden ejercer sus derechos libres de vigilancia. Esto es exactamente lo que garantiza CRYPE: que todos los datos permanezcan exclusivamente entre emisor y receptor, cifrados, soberanos e independientes.
Así, CRYPE representa una nueva era de comunicación: segura, autónoma y libre.
Comunicación punto a punto:
Con la comunicación punto a punto, los datos no se enrutan ni se almacenan en servidores externos. Todo permanece directamente entre los socios de comunicación – protegido por un cifrado sólido. Esto garantiza un control total sobre la información compartida, con la privacidad digital plenamente protegida.
Comunicación cliente-servidor:
En la comunicación clásica cliente-servidor, todos los datos pasan por servidores centrales que están completamente bajo el control de una empresa. Allí se almacenan los contenidos y metadatos. Esto siempre conlleva el riesgo de que los datos sean accedidos, analizados o compartidos. El control digital deja de estar en manos de los usuarios y pasa a depender de que terceros gestionen los datos de manera responsable.
Ventaja de la comunicación P2P
Con CRYPE, todo funciona mediante punto a punto (P2P). Esto significa: los datos no pasan por servidores centrales, sino que van directamente de un dispositivo a otro. De este modo, no existe un “intermediario” que pueda escuchar o copiar información. P2P no solo es más rápido, sino también más seguro – porque la transmisión se realiza exclusivamente entre los dispositivos participantes.
Cifrado de extremo a extremo
Cada mensaje, cada archivo y cada llamada en CRYPE está cifrado automáticamente. Nadie, excepto el remitente y el destinatario, puede ver el contenido – ni siquiera CRYPE. Incluso si los datos fueran interceptados en el camino, el cifrado los volvería inútiles.
Sin almacenamiento central de datos
Como CRYPE no depende de la nube, los datos nunca se almacenan en servidores externos. Todo el contenido permanece en el dispositivo local y solo se transmite si, y a quién, el usuario lo decide activamente. Esto garantiza un control total en todo momento.
Soberanía digital
Con CRYPE, el control total sobre sus propios datos siempre se mantiene. Sin procesos ocultos, sin recopilación de datos, sin dependencia de proveedores de la nube – independencia total para cualquier forma de comunicación. Dado que CRYPE no almacena ningún dato de comunicación, tampoco existe la posibilidad técnica de transmitir contenido a terceros. Los datos pertenecen exclusivamente a los usuarios – y a las personas con las que deciden compartirlos.
Máxima seguridad de los datos
La tecnología de CRYPE cumple con normas internacionales de seguridad, como las utilizadas en la banca o la sanidad. Emplea métodos de cifrado de última generación, que se actualizan continuamente para resistir ataques futuros.
Facilidad de uso
A pesar de su avanzada tecnología de seguridad, CRYPE sigue siendo fácil de usar. Enviar mensajes, intercambiar archivos o celebrar conferencias es intuitivo y no requiere configuraciones complicadas. La seguridad está totalmente integrada y funciona automáticamente en segundo plano.
Solución preparada para el futuro
La arquitectura de CRYPE está diseñada para responder a las demandas futuras. Ya sea mayor volumen de datos, nuevos dispositivos o normativas de seguridad más estrictas – CRYPE evoluciona y se adapta sin esfuerzo adicional.
CRYPE ofrece una plataforma de comunicación donde la privacidad es un principio fundamental, no solo una función.